No era una noche más, era una noche muy especial, especial por un montón de cosas, pero se podía respirar la emoción en el ambiente
También era especial para Benja, su primer noche de tribuna, su primer noche viendo a Nacional en el Parque y en especial viendo a Luis Suárez, cuyos goles escuchó gritar desde la panza, a quien tantas veces había visto por la tele, pero hoy iba a comprobar que no era producto de una inteligencia artificial, sino que era real
Vino con la ilusión de ver a Nacional y de gritar un gol de Suarez
Cuando salieron los equipos, entre feliz y molesto, es que la gente, las banderas y un trapo gigante que cubrió toda la Atilio, le impedían ver con claridad a los jugadores, intentaba encontrar a su ídolo en la cancha
Cuando empezó el partido, con la ayuda de su padre, logró encontrar a Luis, "dále Luis, hace un gol"
Pasados unos minutos, Luis recibe dentro del área, remata y el Coco, cual villano de la película, impide el gol de Suarez que Fagundez combierte en el rebote.
Todo era alegría pero aun faltaba el gol de Luis para que fuera perfecto
El partido transcurría y a Benja le pasaba factura el largo día, las emociones vividas y el dasgaste de energías de horas de juegos y risas, peleó hasta que pudo, pero el sueño lo venció
Quizás hasta ahí hubiera sido una historia más de tribuna, un cuento hermoso para contar, pero parece que a Luis le place hacer nuestros sueños realidad
De repente todo explota, el silencio se vuelve rugido y ese sueño, no se cómo, se combierte en un grito de gol con el puño apretado al cielo
Luis le había cumplido el sueño a Benja, el sueño del pibe, el Luis de la tele estaba escribiendo un nuevo capítulo de su historia y Benja, el que gritaba sus goles desde la panza, estaba siendo protagonista de una noche que seguramente, jamás olvidará
Gracias Luis, de parte de todos los Benja, muchas gracias, gracias a esta hermosa hinchada que lo hizo posible y sobre todo, gracias a Dios que me permitió vivirlo y disfrutarlo
Arriba Nacional
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