El curriculum

 

Todos en estos tiempos nos hemos acostumbrado a hacer los ya famosos curriculums, es casi indispensable para poder acceder a cualquier empleo, si bien luego se concretan entrevistas y en algunos empleos se hacen test de concentración, comprensión y capacidad, ese curriculum es la llave que abre la puerta, ahora,

¿Qué tan sincero es tu curriculum?

Nunca escuche de nadie que destaque sus atributos negativos cuando los escribe, sería algo suicida, imagínate que alguien diga, 

"soy muy responsable en mis actividades pero me paso 15 minutos por hora, en el baño, mirando el celular"

o si alguien confesara, 

"yo no falto nunca pero cada tanto me llevo cosas que no me pertenecen"

¿contratarías a alguien así?

Lo que la gente hace es presentar su mejor cara en esas hojas, cursos, ascensos, promociones, capacidades adquiridas, etc

Nadie cuenta si lo echaron de un trabajo por llegar tarde o por faltar, nadie dice si tiene un carácter que genera rispideces y mal ambiente laboral

Durante el noviazgo cada uno trata de mostrarle lo mejor de si al otro, quizas le llevas un regalo a tu pareja durante el noviazgo y difícilmente te diga "esto no me gusta", o te pida que lo devuelvas, pero una vez casados y luego de algunos años, esas respuestas suelen cambiar, no siempre tenemos la misma dulzura

Tanto nos hemos acostumbramos a este tipo de actitudes que las ponemos en practica, muchas veces en forma inconsciente, en nuestra vida espiritual

Nos presentamos ante Dios con un curriculum, le decimos todo lo bueno que hemos sido, la nobleza de nuestro corazón, que lindo predicamos o cuantas ofrendas hemos dado, pero Dios, a diferencia de quien te va a contratar, sabe todas las cosas, Él sabe tus enojos, tu tristeza, tus fracasos, tus pecados, tus resentimientos y aun esas heridas que no terminan de sanar

No quieras presentarte ante Dios como ese novio perfecto, Él conoce tus malhumores, tus mentiras, tus desánimos y esta esperando que se los cuentes para ayudarte a superarlos

Él no quiere condenarte, es Dios, lleno de misericordia y amor, Dios de oportunidades

Así que, rompe ese curriculum y preséntate ante Él, así, tal como sos, contale todas las cosas que queres cambiar, contale cuanto has luchado y no has podido, dile quien realmente eres y que estas dispuesto a cambiar

Dios contrata los imperfectos, 1 Corintios 1:28

También escogió Dios lo más bajo y despreciado, y lo que no es nada, para anular lo que es

Así como en lo laboral el curriculum es la llave, en la relación con Dios, la llave es un corazón sincero 

Bendiciones